Uno de los factores que más influye a la hora de que el proyecto sea un éxito es la diposición y actitud del cliente, y es que hay "clientes" y "CLIENTES".
Me refiero a "clientes" en minúscula a aquellos que no toman decisiones, nos hacen trabajar bajo varios escenarios, no se involucran en el proyecto, en fases avanzadas del proyecto quieren hacer cambios, no están satisfechos ni con la opción A, ni con la B ni con la C. Seguro que a más de uno le ha tocado lidiar con un "cliente" y desgraciadamente no será ni la primera ni la última.
En el caso de "clientes" éstos son el RIESGO del proyecto y digo riesgo porque aunque el proyecto seguramente tenga más riesgos, el riesgo del cliente pasa a ser el más importante y es fundamental intentar gestionarlo, ¿cómo?
- Debemos conseguir que se involucre en el proyecto, para ello facilitemosle la mayor información e invirtamos tiempo en explicarle la situación
- Facilitar al máximo la toma de decisiones, es fundamental explicar que la Opción A tiene X ventajas e Y desventajas frente a la opción B de forma gráfica y concisa
- Si avanzado el proyecto quiere cambios, le debemos informar del impacto que estos tendrán en coste y en plazos y que tome la decisión
En definitiva se trata de educar a "clientes" para convertirlos en "CLIENTES", sino lo conseguimos el proyecto tiene muchas probabilidades de fracasar.